domingo, 8 de diciembre de 2013

No.

No, me niego a vivir como el resto adoctrinado y sin aliento. Con la única intención de conformarme con todo. Me niego. Lucharé y lucharé por mis sueños, y sea cual sea el impedimento lo derribaré a base de golpes si hace falta, y si se me desgastan los puños, seguiré golpeando aunque sea con las piernas pegando patadas, sea lo que sea lucharé.

Caminaré por los desiertos si hace falta, pero mis sueños no se deshidratarán. Qué me golpeen, que me griten, que me insulten, que me prohíban, pero jamás me matarán la ilusión. Que esos que tanto creen en la formalidad se pudran en su tristeza rutinaria, yo me niego a hacerlo. Y si alguna vez caigo, me levantaré una vez más por cada vez que lo haga, pero jamás me arrodillaré, pueden hacer que muerda el polvo y entre dientes grite que los odio pero me levantaré. Mis sueños están por encima de todo, y si no los puedo cumplir, prefiero morir.

¿Qué piensan las personas que sólo viven por inercia? ¿Qué piensan los que se ahogan en el vaso de la monotonía? ¿Qué piensan los que su ideal es mejor que el de otros? ¿Qué piensan los que se conforman con lo que dan sin llegar a dar el máximo?

Sólo espero poder levantar el puño en alto contigo al borde del acantilado de la vida, y que no nos reproche nada el viento, porque nosotros habremos vivido sin colmar el vaso con las gotas de la tristeza, porque lo habremos llenado de algo mejor, de alegría.


¿Que qué quiero ser de mayor? Yo quiero ser feliz, quiero ser el niño que en su día fui.

viernes, 6 de diciembre de 2013

El arte.

El arte es lo poco que nos queda entre la vida y la muerte.  La psicología te inculca un conformismo para saber darte forma para poder vivir en esta sociedad, te convierte en una pieza más del puzle;  y si sales de los márgenes del folio eres un psicópata, un loco, tú ansiedad se debe curar mediante conformismo y aceptación sin ni siquiera ver que el problema no eres tú. Todos los filósofos eran neuróticos, todos los artistas lo son, o son demasiado normales, a mi parecer es lo segundo, ya que prefiero que me consideren un loco neurótico a ser un insensible. Debatiendo de ello con Herman Hesse en mi mente, pude comprender muchas cosas.

El fin de nuestra  vida no es otro que buscar una excusa para no morir. ¿No lo crees? Nos pasamos toda la vida buscando un sentido a nuestra existencia, sin conseguirlo, cuando lo único que le da un sentido palpable son las ganas de vivir, pero cuando te levantas, sin ganas de luchar, sin más obstinación que la de seguir en esa espiral, estás jodido.


El cielo rojizo es el telón manchado de sangre de todas las atrocidades que pasan por el mundo, y aun nosotros sabiéndolas, no hacemos nada. Una niña de 7 años se prostituye por ahí para poder comer y sobrevivir, pero como no nos afecta directamente no hacemos nada, pero imagina que fuera tu hermana, seguro que la cosa cambia.

viernes, 8 de noviembre de 2013

El lugar donde no estoy en ningún sitio.

Vuelve la fragilidad.
 Estallido de puñales.
Montañas volviendo al mar.

Soplido a las paredes
llenas de telarañas
me transportan a mi cama.

Donde sólo sobrevive un único sueño
es donde yo me perdí y pendí de un hilo
entre rostros de locos, mientras yo miro.

Tragándome las cenizas
de mi conciencia
que se pasan a mi tripa.

Tapizando mi taquicardia 
con una sonrisa despreocupada.
¿Qué será si reventara?

Musita la saliva de los sueños
para convertirse en pesadillas
que te comerán como las despedidas,
que sobrevivirán como el aliento.

Viajando por mis adentros
antes de morir, deseando crecer
sin más desquicio que el sin vivir.
No suelo más mañanas mecer.

Caminando por el café
de los telones prendidos.
Caminando ves el trance
de los pilares corroídos.

El lobo con los colmillos sangrando
por las estepas de las cuerdas 
que nos ahorcan cuando nos distraemos.
Jamás será un buen día para morir
por eso, siempre hay motivos para sonreír.

Anochece y arderé, con cenizas
escribiré  de visitas
de las estrellas que observan
locura de la nada.



sábado, 2 de noviembre de 2013

Contraproducente a la realidad.

Cuando el universo conspira, todo gira y gira. Cuando el tiempo se ríe, de ello te darás cuenta y será demasiado tarde. Perdiendo la noción de ego. Todos los sueños penden de un fino hilo que está bombardeado de cuchillos que poco a poco lo rozan y lo desgastan, hasta que los filamentos que lo componen queden en uno, y cuando ese se rompa quedará sólo el presagio de tu muerte.

Quizá critico demasiado la metafísica de la política, pero aunque lo haga, no me arrepiento porque se lo merece.

Sólo miro a mi alrededor y todos tan sumidos y locos en la conformidad. Todos muertos en vida. El dinero es la cruz del moderno cristo. Pero claro, yo estoy quieto, observando y pensando en la horrible decadencia; aunque en absoluto soy mejor que nadie, sino más bien el peor. Borracho de mentiras. Sobrio de fragilidad. Todos tan amoralmente morales, creen que hacen lo corrector, sin aceptar ni una discernimiento, que la moral es para controlar. Dicen que cuando creces la magia se pudre, se muere, pero eso es sólo porque cuando uno es "adulto" se espera de él que no sea un niño, cuando el único motivo para vivir es poder seguir siendo un niño cuando las arrugas te delaten los vicios.

Venga va, sigue al rebaño, el pastor te espera a las puertas del matadero. Pero claro, no será un camino fácil, poco a poco te matará de una manera sutil, cómo si te envenenara lentamente con Uranio.

A veces incluso cuando escribo, no le encuentro sentido a ello. Porque a fin de cuentas, desgraciadamente, nada tiene sentido. Siento como si mi mente fuera un vertedero del que intento sacar las flores más bonitas, y ni siquiera existen, lo único que puedo hacer son manualidades con esa basura, para darle forma.



viernes, 1 de noviembre de 2013

Hasta los huesos se desnudan.

La vida es una carrera que "tenemos" que ganar, o eso nos enseñan; yo, por el momento, no tengo mucha prisa. La vida es eterna mientras dura, o eso creo; que me maten si no es así. ¿Por qué es eterna? Es fácil de responder: porque mientras vives, lo será, y cuando mueras, estarás tan muerto que tampoco te darás cuenta que has muerto, un poco irónico, ¿no?

Escúpele al dolor, no dejes que la aureola que lo rodea haga que sucumbas a la monotonía extrema, ni al pasivismo. Todos tan apáticos.. Pero claro,con guerra a plena luz y amor a escondidas. Consumo y consumo, más polución, el ser humano podrido, no por su culpa sino por la del estado; y ni que decir de por qué es el estado, todos lo sabemos, pero ninguno lo queremos ver.

A veces a uno lo inundan las dudas, como si fuera tu cuerpo un gran mar  y las dudas el agua. Todos esperamos que el sol irradie para que esas dudas se evaporen, pero si se evaporaran todas, quedaríamos secos, salinos, fútiles, muertos en vida. La duda da margen a las pasiones, te deja un espacio en el que soñar, es decir, te deja explotar los sentimientos. Aclaro que duda, no tiene porqué entenderse tal y como coloquialmente  se conoce, sino como a incertidumbre de la propia vida. Otras veces no sabes si todo es gris, blanco o negro, y te ves envuelto en la vida, perdido, sin saber a donde remar, porque todas las orillas te parecen infestadas de piratas que te sacarán los ojos por nada más que mirar.

El positivismo científico lo detesto, a pesar de ser un científico, soy más de los de Aldous Huxley. Creo más en la doble ambigüedad de la vida, la hipérbola que forma, entre la alegría y la tristeza, entre la pasión y la razón, entre la niñez y la "madurez". Quieres saber lo que es la "verdadera felicidad", primero tienes que soportar los peores castigos, para así entender lo que es. ¿Quieres amar a alguien de verdad? Primero han de haber pisoteado con filo de tacón tu corazón y haberlo atravesado con un cincel a base de martillo, han de haber puesto sobre las rocas tu corazón como el hígado de Prometeo y las águilas han de comérselo cada día como si de un festín sin piedad se tratara. ¿Quieres saber lo que es la vida? Para ello has tenido que ver la muerte en su exhalación final, has de ver la descomposición de la vida retrógrada desde que se alcanza la vejez hasta que al final se vuelve a nacer muriendo.

¿Quieres un consejo? Fluye como el viento fluye por las sonrisas despeinadas. Nada a lo más hondo del vaso, sin ahogarte, meditándolo, sin buscar ríos en el desierto, sin morir en los escarpados suelos del alma. Cómete cada alegría. Respira cada suspiro. Bébete las tristezas con doble de satisfacción, porque a pesar de todo, tenemos que aprender de cada error. La apología a la vida nunca fue mi fuerte, pero siempre se puede sacar algo bueno de todo lo malo; por ello, nunca te rindas, aunque veas que el mundo conspira contra ti, aunque vivas por inercia, aunque creas que un día de estos morirás, explota con pala y pico ese sentimientos y disfruta de esa tristeza porque nadie lo hará por ti, quizá picando un poco más hondo encontrarás un tesoro; exprime los limones, que aunque sean amargos, con ellos se puede hacer la mejor limonada. El problema de la gente esque cuando se encuentra en un callejón sin salida con la tristeza, se ahoga; a mi parecer, debes de estrecharle la mano y decirle: -¿así que ahora tú me acompañarás?, vale, ven, yo tengo que ir por aquí, si quieres ven, vamos juntos, a ver cuánto tiempo aguantas.- Deja  que la tristeza, la impotencia, la desesperación y la angustia te acompañen, a veces, pueden ofrecerte una conversación interesante aunque algo desoladora porque te apedrea con la realidad desgarradora, pero a pesar de todo ello, tú sigue caminando que por alguna calle se sentirá intimidada y decidirá irse.

Golpeo mi pecho atorado con el mal trago del sin sentido de todo, cuando por más que busques, no encuentras ningún sentido a nada. Los demonios de nuestra mente pueden ser nuestros asesinos cuando los fantasmas lo que prefieren es asustarte y burlarse de ti, con la risa más burlona y que aturde.

A medida vez que uno crece, o en mi modo de ver y en mi caso, la vida pierde el poder redentor, se vuelve insulsa. Pero todo ello más que nada debido a toda la explotación encubierta mediáticamente. Los medios de comu-nipulación doma tanto a las ovejas, que uno prefiere quedarse tirado en el sofá antes que hacer respetar su propia vida. Ni la propia constitución vigente se cumple, todo es una tragedia en la que nosotros somos los principales protagonistas que acabarán ahorcados por la orca con forma de dolar. Nadie actúa por el miedo, y todos siempre dicen lo mismo: "esque mientras tenga trabajo", " la cosa podría ir a peor". Pero claro, juegan con las personas, te meten miedo, cuando tú no tendrías que tenerlo. Constantemente en los medios de comu-nipulación te están taladrando la cabeza con miedos, -" la cosa podría ir a peor"-, pero eso sólo hace que las personas se enrosquen y se queden quietas sin hacer nada, porque claro, " la cosa podría ser peor". Todo es una buena jugada de ajedrez, pero no hay que olvidar que los peones se pueden convertir en reinas también.


domingo, 29 de septiembre de 2013

Análoga de la vida.

Tú me diste la vida,
Y con sólo un naufragio,
Me la podrías quitar.

Asumiré el rol de pirata,
Navegaré por tus piernas,
Me perderé en tus ganas.

Me perdí por aquellos montes,
Me dejaron ver paisajes y lagos.
Le quité la vela a mi barco 
Porque navegaba por tus llantos.

Descubrí a una princesa,
Despojada de su morada,
Yo, cual caballero andante,
La quise con todo, y sin nada.

Pregunto y claro en tu alma.
Llueve y solea porque amas.
Incluso a veces te siento tan dentro,
Que hasta otros sentimientos tienen celos.

lunes, 16 de septiembre de 2013

Amando.

Melancolía de estación,
Tarde en tu balcón.
Noches de amor,
Mañanas con corazón.

Caricias que terminaban en canción,
Besos que decían más que las palabras.
Abrazos que comunicaban el alma,
La distancia hizo brotar la desesperación.

Las lágrimas son mi único alcohol
Para embriagarme de esto, que es desolador.
Jamás olvidaré tu dulce sudor,
Aflorado de nuestra incesable pasión.

Mañanas de cama.
Noches, insaciables.
Atardeceres en calma.
Madrugadas inolvidables.

Enfermera de mis heridas,
Descifrando el infinito,
De mi mirada perdida.
Sabiendo cuál es el mérito
De cuando por ti, sonrío.

Ella, antes perdida.
Yo tan distraído.
Ella, tan bonita
Yo tan no sé yo.

A veces palabras sobran,
Algo efímero puede transmitir,
Más que cualquier mártir,
Cuando sentimientos obran.

Mi pecho se abre en canal,
Los sentimientos saltan,
Gritando, claman en alto
Dónde estás, mi amor.

Mis manos se vuelven ceniza,
Quieren rozar la perfección en mujer.
Quiere, rozarte a ti, sin premisas.


domingo, 15 de septiembre de 2013

Recitando al son de los latidos.

La línea que difiere en nuestras almas, es infinita. Destapemos a la inmundicia, lo mundano, estamos fusionados en el canto de la Luna .La luna nos acuna en las noches sin que sea posible el roce de nuestros cuerpos.

Nos da  esperanza por un mañana juntos, por eso no podemos reprocharle nada, ni que se vaya para darle paso al Sol, que es un traidor, que quema los sueños y hace del trabajador un esclavo; lo digo y lo diré, la noche alimenta los sueños. Yo tengo hambre de sueños, es decir, de ti; pero sale el sol y me quema con su primer rallo, que para mí, se asemeja a un golpe directo en la sien, me mata las esperanzas, al contrario que piensan los optimistas que es un signo de esperanza, para mí no es análogo. Lo único que me da vida, eres tú, no el oxígeno, ese falso amigo que al contrario que creen muchos nos da la vida, yo creo que es un veneno que nos embriaga y al final, nos mata, tú eres mi antídoto, mi ungüento para el corazón.
Estoy cansando de tanta banalidad, muchos se ensucian la boca con palabras adocenadas, están amansados, domesticados, tienen al sentir metido en un redil; “la ciudad es un nido de avispas, y yo me presento con un ramo de flores para ti”. Tus ojos fueron el sacramento, que a mi gato no mataron, al contrario, renació sabiendo.  Un poeta dijo una vez: “Todas las canciones de amor están llenas de mentiras”, aunque yo puedo añadir que jamás mis ojos fueron un aflujo de tanta pureza, que transformaron los sentimientos en un agua cristalina y celestial.

La distancia es una cuerda en tensión que espero que jamás se rompa, a la tensión le digo que se ande con reojo, que una mente nerviosa es una mente ofuscada, y la tranquilizo con la idea del futuro, del porvenir. Fregaré las esperanzas que vomité por ojos y por qué no, por mi boca, y aunque suene pueril, me bebí esas esperanzas, tú me diste fuerzas para ello.

La poesía son unos grilletes que uno lleva consigo siempre, en el interior. Cuando más escribes, más se te despierta el hambre por escribir, y tu voracidad, aumenta. Cada vez te cuesta más y más vivir sin poesía y para mí, poesía eres tú. Recitar al ritmo de tus latidos, al compás de tus gemidos, eso es poesía. Tocar tu cuerpo como las cuerdas de una guitarra, eso es poesía. Lamer los poros para que en mi lengua emanen sensaciones inexplicables, eso es poesía.  En consecuencia, y por tanto, poesía, ERES TÚ.
A veces me tacho de loco, ¿ puede que lo esté?, creo que la respuesta es sí. Loco por ti. Soy un loco de atar, que espera ser atado a la pata de tu cama, para ahí cenar todas las noches. Las manos serían los cubiertos, nuestros fluidos serían el líquido que saboreamos cuando hay sed, los besos el entrante, los cuerpos el segundo plato y el postre, bueno, el postre  es en sí, todo. Todo es dulce, amargo, salado, agrio; lamiéndote y devorándote explosionan en mi paladar todos los sabores posibles. Sólo encuentro una palabra para definirme, LOCO.


Encontré en tus brazos el refugio más cálido en invierno, y más fresco en verano. Sentí mil primaveras en mi vientre al verte sonreír. El otoño fue la despedida, nunca sufrí tanto. Aunque bueno, miento, sí he llegado a sufrir más, y es por no tenerte aquí.


El poema de los resignados.

Nosotros, resignados a vivir sin vivirnos.
Nosotros, amándonos, viendo la vida morir;
Morir, sin tocarnos, sin besarnos.
Morir del frío de vivir sin tus labios.

Lo bueno de la resignación, es poder aceptar,
Estos días de lluvia en el alma que ama sin poder tocar,
Sabiendo, que mañana, podre vicioso amar,
Todos los poros de tu cuerpo sin preguntar.

Espero que las mañanas, no te engañen,
Porque el sol dice que da esperanza pero quema,
Quema los sueños , y nosotros, estamos en condena.

Yo no sueño de noche, sino que sueño despierto.
Porque ocupaste más días que cualquier otro sueño.
Grito y alzo al viento,
cualquier resquicio de infelicidad que queda despierto.

Clamaré en tus sábanas mojadas de la alegría de tu cama,
Poder repetir todas las noches de desvelos que pasamos sin calma,
En el que tú eras mi sacrilegio y mi dama,
Yo tu poeta con alegría que sana.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Barcelona


Pasé seis días y cinco mil noches en Barcelona, no estaba solo, estaba con ella y eso era suficiente motivo para vivir. Trasgredimos todo lo establecido en cuanto a la felicidad, la moral, lo bueno, lo malo y el amor; la pasión y la confianza eran nuestro lema. Comparado a nuestro son el alrededor era mediocridad. A nuestro lado todos estaban muertos, todos estaban viciados por la ciudad, todos eran esclavos de la monotonía y sus grilletes, eran su hastío y sus caras largas. Nosotros rompimos toda cadena y gritamos junto al acantilado de la pasión: !GRACIAS!


Los lugares mágicos eran yermos al compararse con nuestros besos y sonrisas, ya que nosotros éramos los que hacíamos de esos lugares algo mágico, algo inigualable. Paseábamos sin preocupación alguna, ajenos a la realidad, haciendo de lo real algo irreal en la que nuestra realidad éramos nosotros. Me di cuenta de algo en todo ese tiempo, nunca jamás me sentí tan pequeño, pero tú me hacías grande. 



 La gente no era capaz de contemplar todo aquello, se ve que la costumbre hace despreciar a la belleza. Poca gente era capaz de apreciar todo aquello, veía a todos con caras monótonas, sumidas bajo el agua turbia de la rutina; y muy pocos con caras de asombro y euforia como la nuestra. Nosotros dábamos vida a la ciudad, ella nos miraba con desprecio y nosotros le devolvíamos la sonrisa más sincera que jamás se haya visto. Los paseos hacían que el tiempo fuera algo tonto; rompíamos las agujas de los relojes de todo, de los sentimientos: nos entregamos, de los suspiros: delirábamos, del amor: amábamos. El tiempo era un fluido que nos traspasábamos entre nuestras lenguas. Gritamos en alto sin hacer ruido, pero el estruendo que causo en nuestros  corazones hizo retorcerse a toda la ciudad.

 La perfección existe, créeme; la descubrí en tus besos.

          

La felicidad viaja disfrazada de ti en el último tren y yo lo cogí. En aquel momento el maquinista me preguntó que a dónde quería ir y yo le respondí que a tu corazón, a un lugar puro y sincero, donde la vida duele menos. 

Secuestramos al tiempo y lo violamos amoralmente. Lo dejamos atado en el cuarto de baño de las desilusiones. Nosotros bajamos en tu corazón. Una vez allí, bailamos una danza en el fuego sin quemarnos. Donde los besos eran monedas tiradas a un pozo en el que los deseos eran esos mismos besos.

Aprendimos a aguantar la lluvia sin que el fuego se apague.

     



Los momentos más gloriosos y de mayor regocijo que puedas tener serán frustrados bajo la cautelosa máscara de la realidad, por eso, nunca suspires, nunca llores, nunca exhales tu alma por una despedida, porque es mejor decir un hasta luego que un adiós. Que lo nuestro sea un capricho eterno.

La ciudad vicia a las gentes que cruzan lo visible a su son, las pudre; porque las vuelve insensibles a los sueños y a lo que en su día fueron, personas.

Nunca navegues en los reproches de uno mismo, podrían embriagarte en la más profunda melancolía, simplemente, renuévate constantemente, y si haces lo dicho anteriormente, que sea por mejorar, no por culpabilidad. La culpa bifurca los mares de la realidad porque a lo que no es lo vuelve ser y a lo que es, no ser. No grites en silencio, grita en los folios, ellos te harán el amor cuando todo esté de luto; y si gritas en alto que sea de la mera alegría, porque a las banalidades que te somete la vida no permitirán que lo hagas por tristeza.

Regala todo lo que tengas, y lo que no, también. Sueña y siente todo, aunque ésto sea un arma de doble filo, te llevará a sitios y éxtasis que ni las propias drogas podrían. Sentirás explosiones e implosiones en tu pecho; la guerra será tu día a día y el amor tu noche a noche. Las metáforas son un simple juego para entorpecer la pasión, y las palabras una doble metáfora; por todo esto, habla con los besos, folla con la lengua y grita con la polla, empápate de algo sincero como lo es la pasión, como lo es lo nuestro. Por todo lo dicho anteriormente, lo nuestro fue virtuoso,sublime, celestial, porque sin decirnos nada nos decíamos todo, nos mirábamos y nos contábamos tantas cosas, los silencios eran conversaciones que no paraban nunca.





Tengo ganas de abrazarte,
enzarzarte, en las raíces del arte,
del sólo rozarte y tragarte,
como un guerrero que alardea de su estandarte.

Tengo ganas de arañarte, 
aunque la luna no acompañe,
tengo ganas de contarte,
que la ciudad como el alma brilla incansable.

Tengo ganas  de cantarte,
con gestas sórdidas de miradas,
de rozarse, con pasos de estrellas,
que son polvo de hadas.

Aun así he de confesarte,
que das hambre al poeta,
de corazón, despiertas sus sueños,
de devoción, que reine en cielos.

Lo apolíneo tanto como en pasión,
complacer a este dueto 
con amor y con furor,

Enciendes el fuego,
tal como la piedra del mechero,
abrasas las pestañas con tu mirada,
disparas al alma sin esperar nada.


Una ciudad de arte y para el arte. Una ciudad en la que te podrías perder, para así, encontrarte, creedme, yo lo hice. Me tuve que perder del todo para así poder encontrarme. Encontré al pequeño que tenía recluido, con otros yo, el divertido, el ilusionado, aunque bueno, el imbécil tenía un permiso para salir. Todos fueron liberados de su arresto domiciliario.

 A veces, uno es capaz de llegar a vivir el día a día por inercia. La gente te dirá lo que "están destinados a decirte" y " lo que la sociedad les manda que tienen que decir", tal como: "tienes que buscar una meta" o " lo que te hace falta a ti es salir más, hacer cosas nuevas" y quizá, de cierto modo lleven razón. La mediocridad inunda los desiertos de la mente, "tal como olviden sus derechos y se maten por el fútbol".

 También he de añadir que cada moneda tiene su otra cara, pero la otra cara está sobrevalorada, es la que siempre nos intentan vender, y yo, ya la tengo muy vista. Creo que el ácido de la bilis  de algún borracho la corroyo y el tiempo hizo que se volviera difusa, que se volviera polvo entre las manos, lágrimas que caen al mar, es decir, inexistente. Pero aún así, nos la intentan vender, aunque el mundo sea un esqueleto danzante que perdió las carnes en una apuesta con la tiranía, en darle la oportunidad al humano.


¡Educación gratuita y de calidad!

Hoy día, es de interés que el pueblo sea un burro que se usa para labrar la tierra. ¿Acaso crees que eres libre? Ten claro que te van a enseñar lo que convenga. Todo esto es una gran mafia, pero no la entiendo, no entiendo cómo se puede vivir tranquilo haciendo tales cosas. Será que como dije una noche entre sollozos, yo soy de marte.




La neblina grotesca y empañada,
se ha disipado.

El frío ha gritado y expirado; sólo de momento.
El corazón cristalizado 
se ha diluido en tus besos.
Serás sol en la penumbra,
cohesión de mis lamentos y musa de mi tiempo.

Hoy será por los que ríen, 
mañana por los que han amado.
Gritaremos al tiempo con un cándido
-vete, que nosotros bien estamos.-
Armado con letra, bailaremos el tango.
Las flores florecerán en mi cabeza 
mientras yo disparo.

El gruñir de los apagados,
el fluir de los bien parados,
nada, absolutamente nada,
hará distraernos de nuestras nanas.

Tú canta, yo escucho,
serán grillos o será el viento,
aquel que me acompaña
mientras escribo sin arrepentimiento;
o será tu presencia grácil,
que está en mi mente y me susurra:
-Ven junto a mí,
que  ya no puedo vivir las noches sin ti.-


En tu ausencia me doy cuenta que esa misma ausencia tuya  me derroca el vaso de la alegría. Sin ti, no soy nadie. Un día sin saber de ti es un infierno en el que me quemo efímeramente, pero de manera eterna. Los días sin ti son como un veneno que me contunden al corazón, la mente me pregunta que por qué no derrocar a la sociedad para mandar todo a la mierda y estar allí por ti. 

Maté a mis demonios y fantasmas con el arma blanca llamada "amor" que me otorgaste.  Los rayos del alba son una banalidad comparada a la luz de tu sonrisa. Siempre gritaré: ¡ven!


El metro. El metro era mágico. Los recuerdos de nuestros besos y abrazos en el metro me golpean cada mañana. El metro estaba envuelto de ociosidad, pero también de fuego en nuestras miradas. La ociosidad la causaban las gentes, con caras lánguidas y tristes; nosotros éramos el contraste, el fuego, nosotros nos quemábamos con las miradas, nos desnudábamos y nos follábamos sin ni siquiera tocarnos, nos hacíamos el amor en la mente. Conculcamos las leyes de lo físico, de lo establecido, y el juez se quedo anonadado, nosotros le sacamos el dejo y le dijimos que le den, que lo nuestro era lo más real y holgado que jamás verá, que su ley terrenal se quedaba corta para nosotros, lo nuestro era algo mucho más transcendental, que estaba fuera de las leyes de lo mundano. 

Dimito como ser humano. Prefiero fusionarme con tu vientre y aullar como un lobo todas las lunas llenas que lloran y se van a algún bar a llorar en enero, con las nubes llenas de polución, por los suspiros de la gente. Yo les digo a esas aéreas figuras esféricas que no lloren, porque serán testigo de las noches de pasión más intensas que habrán visto, entre tú, y yo.



La precariedad de la vida hace que no sepa qué pasará. 
Yo sólo espero poder aferrarme a tus caderas
y que pase la tormenta.

La lluvia arremete contra la almohada.
El motivo, la despedida.
Al conocerte tenía una fiel amante, la muerte.
El impacto de besarte me hizo apartarle la mirada.

El sinsentido de mi vida se esfumo como la calígine de las mañanas turbias.
Antes, vivía por inercia, en una busqueda constantemente inconstante de un por qué,
de un motivo, el cual, me fuera de arropo a los días de lluvia de  mi alma desnuda.
Ahora, el motivo lo hallé, pero la fatalidad de lo establecido, nos separa de los sueños del anochecer.

Tirado en la cúspide de lo onírico,
me desvelo cada noche, trastornado por tu imagen.
Me abren el pecho y mi sangre fluye por un río,
entre un desfiladero, donde macabros seres me observan,
riéndose de la inocencia que me han quitado, que han violado.
Perdí la oportunidad de ser niño hace tiempo.
Mis sueños los resquebrajo la sociedad en un rito.


Pero tú me los devolviste,
 por eso, 
te debo la vida.





Paseamos por el arco del triunfo, bajo aquel majestuoso monumento. Todo parecía sacado de una novela romanticista. Ella y yo cogidos de la mano, con apatía frente al resto del mundo, sólo pendientes de cómo se deslizaban nuestras manos entre la hondura que quedaba entre nuestro pecho. Ella caminaba desnuda por aquel paisaje pintoresco, en mi sueño sin gentes; estaba debajo del arco, ese arco se llama del triunfo porque yo había triunfado en su corazón. 

Su desnudez es incomparable a cualquier monumento, ella posee una belleza y apogeo como una rosa en pleno florecimiento, pero también, un aura, un aura que la llena de seducción que la hace objetivo de todos los disparos de las pestañas de mis ojos y de todas las fotos que mis pupilas lleguen a almacenar en esta atrofiada mente.

Paseamos largo y tendido, hasta que llegamos un lugar no muy recóndito y algo mundano, el cual fue pasto de nuestras risas y besos. Empapamos de algo sincero esos días, algo imborrable, tinta de marca "AMOR". 

Oscar Wilde dijo que la diferencia entre un capricho y una pasión eternas es que el capricho dura un poco más. Que lo nuestro sea un capricho entonces.




Nos fusionábamos con la noche sin premisas. Nosotros era una constelación que brillaba como las luces de los coches, sólo que nuestra luz no contaminaba.


En un mundo sin palabras,nosotros hablábamos y hablábamos,
no con simples vocablos.
Batiendo tus pestañas y retumbando en mi cama deshecha ,
nos decíamos lo que sea, aunque no dijéramos nada.

En el balcón de mi memoria contemplo pasear a los recuerdos.
Visten de luto, tristes y algo moribundos.
Dicen que la promiscuidad del tiempo hace sufrir,
todo esto, me ha hecho darme cuenta que sin ti ya no puedo vivir.

Soñaré con la justicia poética del tiempo que aparece en mi mente.
Mi álter ego tiene recelo y envidia de todo esto,
dice que antes sólo la angustia y desesperanza nos hacía el amor cada noche,
ahora eres tú bañada en las nubes y la miel, pero me despierto, es otro amanecer.
Otro amanecer sin tus alas justicieras que me salvan de la rendición.
Otro amanecer, en el que mis brazos, rompen a lloros por no tener a mi redención.



No sé si debería hablar de temas ideológicos, pero creo que es necesáreo. Vi el pequeño rescoldo de esperanza que queda para la libertad, para la pasión y la alegría. Las personas tienen un mal concepto del comunismo y del anarquismo. El comunismo práctico no ha sido el mejor que se ha podido ver, pero creo que con un poco de educación, cultura, de voluntad y un poco de humildad sería posible. Historias y hechos escuché, vi ignorancia, estupidez, y  me sofocó la rabia, pero no está bien llamar estúpidas a las personas, mejor llamarlas ignorantes, gente que tiene su vida tan vacía debido a que su mente está vacía, que necesitan meterse en la de los demás para así sentirse mejor y hacer que el poco rescoldo de inteligencia que les queda se regocije en un éxtasis de mediocridad extrema.

Desde pequeño siempre sentí rabia por el sufrimiento ajeno incondicionado. De pequeño siempre buscaba ponerle frente a todo ello, pero me di cuenta que la conformidad humana respecto a ello, es alarmante. Todo ello me defrauda, porque las personas en cuanto a nuestra vida material somos unos inconformistas pero a la hora de algo que es directamente afectivo frente a nosotros, somos como un saco de trigo rajado. 

Siempre seré anarquista de corazón y comunista de cabeza.


He descubierto a la chica imperfectamente perfecta para mí. Ella es luchadora, combativa, y capaz de darlo todo por mí. No pone reproches a la vida y la vive conmigo cogidos de la mano. Yo pasaba las noches aferrado a sus caderas, agarrado a su alma. Ella las pasaba follándome la mente, a mi corazón y a mi ser.

Me lleve la jarra llena de besos que acabaron en tu boca. Recuerdo su sonrisa, la sinceridad es su principal característica. Pasamos la semana más corta que jamás existió, pero aun así, la más intensa que nuestra sien llegue a conocer, la más ardiente y limpia que esta ciudad jamás llegue a ver.

 Ella tenía el pelo suelto, era valiente, sonriente y con su estandarte entre los dientes, entró en mi fortaleza, se presentó como una salvadora. Su armadura relucía como ninguna otra, indiferencia y fortaleza, pero su interior era el de alguien dulce, yo, conseguí ver ese interior que me enamoró y cautivó. El "ubi sunt" se respondió, todo estaba en ti. La guerrera, seguía siendo guerrera, pero nadie supo ver su luz, yo afortunado y agraciado lo vi, agarré y amé.

Fumamos sin cesar, la mente era el papel, el corazón el tabaco y el alma el filtro. Nos consumimos en un baile eternamente finito, ya que, al convertirnos en ceniza renacíamos y volvíamos a consumirnos con una llama más intensa. Ella siempre sonreía, yo moría. Ella siempre gemía, yo, igualmente moría.


"Si te dejo entrar,
 tú solamente querrás irte.
Si te digo la verdad, 
pelearás por una mentira.
Si derramo mis intestinos,
 sería una asquerosidad
que no podríamos limpiar.
Y si me sigues, 
solamente te perderás.
Si tratas de acercarte,
 sólo dejaremos de tocarnos.
Como ya sabes demasiado,
ahora no irás a ninguna parte."

Me dejaste entrar y yo no quise irme.
Me dijiste la verdad y no busqué mentiras.
Derramaste tus intestinos y juntos, los limpiamos, porque era amor.
Te seguí y me encontré, nos encontramos.
Me acerqué y nos tocamos como nunca.
Ahora que sé demasiado, no quiero irme a ninguna parte.




Esa hoja que vi caída en el suelo, marchitándose y siendo pisoteada, me desgarró el corazón. Nosotros somos como esa hoja, fuimos pisoteados pero nunca hay que olvidar que puede haber alguien que coja esa hoja y en vez de ver la parte maltrecha y deshecha, vea la parte verde y resplandeciente. Nosotros nos vimos.

Cuando nos reencontremos, la parte parda que tiene el corazón arañado, se transformará por completo en la parte verde, hermosa y dulce.

Por ti planté un árbol en el campo yermo de mi corazón, en el que fluyen ríos de sangre y muerte. Y sin darme cuenta, creció el bosque más lúcido y bravo que jamás llegó a existir. Ese árbol daba sombra a mis penas y las apaciguaba, las sedaba con tu amor. Tú eres la enfermera de mis horas y minutos, en los que te sueño despierto.


La servilleta del día antes de la despedida fue testigo ante el tiempo injusto.

En este trozo de folio
no quiero ningún aviso.
Y que si no es eterno;
que lo sea hasta la muerte, te pido.

En este trozo de mundo 
escribiré desnudo,
sin chantajes, ni disfraces.
Algo que al leerlo provoque retales.

En este trozo de vida
violaré a las despedidas,
porque no quiero desdichas, 
porque no quiero vida sin tu sonrisa.








viernes, 2 de agosto de 2013

Velocidad entre inquietudes quietas.

Los puntos de mis heridas explotan.
Se abre el abismo en mi pecho.
Si quieres, échale sal y goza,
deja que tu lengua pruebe el sabor a desecho.

"He estado tanto tiempo naufragando,
que me cuesta creer que voy viento en popa en un bonito barco".
Incontables veces me he tragado los sucios charcos,
que se disfrazaban vanidosamente de pureza entre tantos.

Mordí los silencios que quedan entre cada suspiro.
Me ilusione cual niño con las pretensiones de lo prometido.
Ahora, que tengo una vacuna para la realidad,
todo duele menos, pero pincha cada día más.



jueves, 1 de agosto de 2013

Y aunque no eramos nada, fuimos poesía de vez en cuando.

"Y aunque no éramos nada, 
fuimos poesía de vez en cuando."
Tú la locura que de la locura me desataba,
yo la cordura que deseaba que tus piernas temblaran.
Desquebrajamos las reglas de lo establecido 
y oímos desplomarse al tiempo sobre el resto, después huimos.

Cómo las rosas florecientes, bellas y resplancedientes
te plantaste con erotismo a las puertas de mi fortaleza.
Pero olvidé algo, las rosas puedes corazones atravesar.
Quemaste mis pupilas con tu lascivia, me da miedo imaginarme verte.

Todo esto no tiene valor porque somos unos inconformistas.
El amor idílico está enterrado por algún cementerio
en el que vaho de nuestros cuerpos lo hizo invisible a la vista.
Ya sólo está presente en libros y cuentos par
a que poetas puedan ganarse la vida.


martes, 30 de julio de 2013

Desprovisto de todo, me arrojo a lo más hondo.

Por más noches que implore tu llegada,
no creo que ese pedimento sea escuchado.
Por más que pida que tu cuerpo descanse en mis sábanas,
no creo que tu mirada se digne a posar sobre mi corazón malparado.

Estoy acostumbrado a baquetear con arpías,
que ponen mi hígado al sol para despedazarlo en trozos.
Aunque yo mismo no soy un trozo de oro;
lo único que deseo, es encontrar un lugar en el que acabar mis días.

Maldita esta sensación de abandono de mí mismo,
me corroe como la bilis que se produce por desamor.
Vomité las ilusiones por los ojos y cambié mis esperanzas por harapos de mendigo.
Con clamor me pedí a mi mismo ser mejor sin entender bien por qué vivo 
y cuál era el enrevesado plan que ahitaría mi alma.

La tristeza me mira con lascivia
dice que hacía tiempo que nadie la follaba tan bien.
Me enveneno y me coso la sonrisa,
¡Qué mal me sienta cada amanecer!


lunes, 29 de julio de 2013

Noche con los poetas muertos.

Cuántos versos como éstos habrán recitado ya,
los poetas que esperan en su templo reposar.
Cuánto amor habrán dado a su amada,
o cuánto y cómo habrán vivido,
me pregunto siempre que escribo.

La noche es el refugio de los que sueñan,
pero aún así se sienten solos,
y por eso, se arriman a su botella.
Yo me arrimo a la imagen de tu pelo,
de tu sonrisa o de tus sueños.

Vicente Aleixandre con su " Unidad en ella",
recreo esos versos como pasajes en mis sesos,
Como Neruda en sus "Cien sonedos de amor"
te quiero a fuego y clamor.

Recreo todos las glaciares de mi corazón,
y el infierno de deleite ha llegado al lar,
vestida de mujer, rebosante de paz,
un infierno que quema y cura, 
al que tiene sed y no quería amar.



Pólvora entre los ojos. ( Especial dedicación para un pájaro libre que ha anidado en mi vientre)


Préndete en un baile con mis ojos,
arde en mis delirios y despréndete de relojes. 
Danza con la noche y sus despojos, 
apréndete mis susurros de entonces. 

-Farolero, ¡ay enciende la vela!, 
que el tiempo es como una mecha, 
se prende pero no espera.- 

Sirena, nada en la resaca del mar, 
entre la alta y baja aurora, 
que por allá están aullando los grillos, 
que están embriagándose por algún lar. 

La cena ya está servida, 
la cama será la mesa, 
las manos los cubiertos, 
y nuestros fluidos ahitarán para mantenernos despiertos. 



jueves, 18 de julio de 2013

Prende vuelvo, y vuela al mar.

Asumo el rol de pirata sin bandera,
botella sin dispensador.
Asumo que soy pero no soy;
estrella, cielo, persona, perro, o quizá, soy o no soy.

Si soy, soy tú, soy yo, soy nosotros, soy el mundo;
si no soy, soy nada, soy vacío, soy infinitud.

Prefiero ser y no ser,
a perecer entre tus bosques
por un disparo de cazador de las pestañas,
o quizá, lacónicamente rápida será mi huida.

Huida en el primer rayo de oscuridad de la mañana, 
nanas del viento que entran por mis orificios 
y por ello, me meceré en los disparos y cañones de los precipicios.

A pesar de que el insecto gruña;
morirá; porque las flores primaverales serán y no serán, 
y el canario rojo  de mimbre es encerrado entre los garrotes,
aún así, aullará con alegría.

Ahora enséñame a hondear, a navegar.
Desenséñame a graznar porque soy y no soy.

Astros que se disuelven en el café de los corazones.

Vacilante sinceridad
de tan comprensible vanidad.
Raíces de sueños, que suben
hasta tu boca para ahí fomentarse.

Resquebrajar de los pilares
para caer en el abismo.
Chimenea motorizada que avanza
con el emanar de tus aguas sagradas.

Salto hacia arriba,
caigo hacia el cielo desde el mar.
Las nubes son mi acera,
la lluvia mi río,
las estrellas mi mar de mal.

Las personas son astros;
tu cuerpo mi mundo;
tus nalgas prietas , paraíso en el que viajo 
al son de los tic-tacs de tu canario rojo,
enjaulado, furtivamente,
para luego, enzarzarme en abrigo de desechos
de mi cuarto en el que soy esclavo.


El hogar está en ningún sitio.

El hogar se ha ido,
y no sé si es por huir o por ser virtuoso.

Huir de la sandez; lo grotesco; la fata de dudas; la agonía de unos,
para el regocijo de otros,
no lo sé.

Virtuoso por evitar abrasarnos y no empaparse de nuestra ignorancia,
ya que, podría hasta apagarse,
por evitar su destrucción.
Los humanos destruimos todo lo que tiene libre albedrío 
y no podemos controlar en nuestro vago intento de controlarlo.

En fin, no sé...Creo que es más lo primero que lo segundo,
pero a la vez más lo segundo que lo primero, 
y viceversa.

O quizá todo se resume en un paroxismo en la búsqueda de la Luna,
que ha dejado una oquedad como las polillas en el viejo roble.


sábado, 4 de mayo de 2013

La noche es mi consejera, yo su fiel amante.

Después de todo este tiempo de sequía creativa; de excesos y defectos; de despechos; de ser náufrago de mi propia existencia; he vuelto. A lo mejor mi vuelva no exhala vitalidad, ni mucho menos ganas de vivir pero aún así sigo vivo, y eso es lo que importa.

Estoy embarazado de mi angustia y ahora mismo, siento los dolores del parto. Analizo la situación y quizá suene tópico, pero ante todo, no soy manido. Tampoco quiero sonar ni misógino ni machista. No puedo tirar la piedra libre de culpa porque he sido grumete de barcos que han navegado en océanos de mujeres, de despechos, de lujuria que no se asemejan ni al propio infierno; pero como grumete he subido de rango y he aprendido. He aprendido que una mujer es capaz de lo que sea por venganza, por lastimar; es capaz de abordar a otro chico sin sentir deseo por él y solamente para hacer sufrir al que ha sido su análogo, su otra mitad en otro tiempo. He aprendido que el egoísmo es el motor del barco que naufraga en nuestras vidas, es motor de la vida; porque la motivación humana es así, o esque conoces a alguien que no espere nada a cambio de nadie; debido a todo lo anterior, las relaciones entre personas me defraudan; todo es una simple cadena de favores y de favoritismos. Pero ante todo, deseo aclarar que es sólo mi visión y que como cualquier otra cosa, puede ser enfocada desde distintos cánones y matices y no por ello ser mejor o peor, sino otra visión.

Ante el vitalismo y las ganas de vivir, me presento como primer recluta para ello. Y hay veces que verdaderamente me fundo con la realidad y me empapo de las ganas de vivir, porque no todo en esta vida es constante sufrimiento ni constante felicidad, es un continuo fluir, es la tragedia griega. Por eso, odio y amo a la razón; detesto y adoro lo dionisíaco ( en lo referente a la terminología de Nietzsche) . La razón es fundamento de nosotros pero no tiene que ser puesta en un altar, ni tampoco despreciada; y es la misma parodia con el placer, el cuerpo y lo referente a lo pasional. Ambas son parte del ser, porque si quitas uno, matas a nuestra mitad.

Me inquieta mucho que todos nos juzguemos. Todos queremos creer que lo nuestro es lo mejor, no todos piensan así, pero la gran mayoría sí; odio generalizar. Cuando por ejemplo; hablamos, oímos pero no escuchamos, es decir,  no escuchamos al otro para así poder comprender y aprender otro punto de vista sino que en el momento que hablamos con alguien lo que hacemos es mientras nos hablan, estar pensando como debatirle eso, para así desfundamentar lo suyo y que lo nuestro quede por encima. Para así demostrar mayor poder. Así de simples somos los humanos, queremos aparentar, demostrar poder, porque eso nos hace regocijarnos, sentirnos mejor, más seguros.

Pero todo esto es desde un punto de vista quizá crítico y pesimista, no hay que olvidar el lado positivo y optimista. Porque no todo en el continuo fluir es bueno, ni todo es malo. Simplemente todo es, mientras que sigamos viviendo. A veces estaremos alegres y otras no. Y a mi parecer, cuanto antes aprendamos eso y nos quitemos de los bastones que huelen a Dios, antes podremos empezar a vivir nuestra propia vida.